martes, 4 de mayo de 2010

De Profundis



He terminado de leer la más larga carta de reproche jamás escrita, De Profundis, obra de Wilde dirigida a su amante Alfred Douglas en la cárcel, donde estaba debido a su relación con éste.

En la carta Oscar cuenta la de "perrerías" que le hace el muchacho, la forma en que fue chuleado y traicionado. Esto me ha sorprendido bastante, ya que lo tenía por un hombre bastante arrogante y que era él quien manejaba el cotarro y todo el mundo bailaba a su son, pues no, el niñatillo pijo (ya que Alfred era hijo de un marqués y de 21 años cuando se conocieron mientras Wilde tenía 37) lo manejó a él hasta el punto , como el mismo poeta dice, que fue la causa de su declive personal, social, artístico y económico.


Me llama la atención y también lo comprendo, todo el odio que tuvo que ir almacenando el poeta para escribir tantísimas páginas de reproches a una sola persona y digo comprendo porque en unos 3 o 4 años paso de estar en la cima a la cárcel y sin una sola noticia de su ex amante, esto si que duele, además de ser el causante de su mal ni una sola respuesta en esos duros momentos.

De entre muchas frases buenas que se pueden sacar del libro me quedo con esta: " Sucumbir es adoptar costumbres"...

Por mi parte alguna carta de reproche he escrito alguna vez, claro que no me dio para un libro, a lo sumo 4 páginas, y es algo de lo que siempre me arrepentí, no por lo escrito en ella, más bien por el sistema usado, para esto creo que es mucho mejor de viva voz, que lo escrito, escrito queda y nunca se sabe...


9 comentarios:

  1. Yo l leí hace mucho me pareció una bella carta de amor... "Querido Bossie..."

    Estábamos dando un paseo y descubrimos tu blog. Después de un minucioso estudio, STULTIFER te otorga el prestigioso galardón al MEJOR BLOG DEL DÍA correspondiente al miércoles 5 de mayo de 2010 en No sin mi cámara por los contenidos y matices. Visitanos y comenta con nosotros. Saludos cordiales.
    Vamos, que nos ha gustado mucho y hemos querido acercarnos a ti.
    Puedes colgar el Premio voluntariamente en tu blog.
    Ya formas parte de la Orden del Stultifer de Oro.
    Y si tienes una escalera, mándanosla a edusiete@gmail.com y la publicamos inventándonos una historia.

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  2. El tal Alfed representa ese lado negativo del mundo gay: el mariconeo marujista, aspecto que detesto con toda mi alma y contra el que lucharé (o evitaré) siempre...

    Besotes

    Xim

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  3. Pobre hombre, cuánto daño le tuvo que hacer Alfred...

    Aaaiinnss si es que el amor es taaaan ciego!!

    Besitos

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  4. Sin duda Oscar wilde era una persona atormentada.......pero eso era porque era tremendamente inteligente como demuestra en sus escritos

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  5. Pues muchas gracias por el premio desde luego q intento ponerlo en el blog a ver si se como...;)y alguna foto de escalera creo q tengo y os la paso

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  6. Los reproches no sirven de nada. Lo tomas o lo dejas. Perdonas o no.
    Claro que si estás en la carcel a causa de una relación y el otro ni te visita, puedes escribir reproches para llenar la biblioteca de Alejandría.
    Me apetece echarle un vistazo.
    Un abrazo

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  7. MMM JL, como dice Uno habrá que darle un vistazo a esa obra... Yo solía ser bastante impulsivo y soltaba todo lo que tenía dentro cayera quien cayera, con el tiempo me he dado cuenta que eso no me servia ni de consuelo "Eres dueño de lo que callas y esclavo de lo que dices"
    Así que mejor callarse ciertas cosas ;-)
    bsote

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  8. los reproches nunca son buenos, echar cosas en cara es una de las cosas menos sanas que hay... si alguien merece tus reproches, probablemente no merezca tu cariño, xq errar es humano, pero el q te quiere se da cuenta y pide perdón

    me quedo con la frae de alforte, "eres dueño de lo que callas..." chapó!

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  9. Hace poco se lo recordé a alguien:

    LAS VERDADES CALLADAS SE VUELVEN VENENOSAS...

    Por eso hay tanta ponzoña siempre flotando en el ambiente, a la gente no le gusta que les restrieguen la verdad por la cara, prefieren cargar con su máscara moralista y encadenarse a la ilusión de lo políticamente correcto...

    Vanidad de vanidades...

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